Los madrileños regresaron a Guadalajara como parte de una gira que comprendió siete ciudades del país, con el festejo de sus primeros 20 años
El Anexo Independencia tiene el acierto de mostrar propuestas no tan comunes y que después de ahí han dado saltos ante la masividad, ahora fue el turno de los españoles Stafas, que si bien son profetas en su tierra, en México ya tienen un registro de cinco visitas que les han valido un gran cúmulo de seguidores que los esperan en cada regreso y que ahora se reunieron para festejar sus primeras dos décadas entregados al rock and roll.
Los anfitriones de la noche fueron los tapatíos de Huracán Skank, quienes de la mano de Perro Flecha y 13 Anclas, comenzaron a desfilar desde las 20:30h, al ritmo de ska y punk rock, haciendo honores a lo que se cosecha en tierras mexicanas, siendo muy bien recibidos por todos los presentes.
Pasadas las 22:30h, Michel Molinera (vocalista y guitarrista), Javier del Palacio (bajista), Jimi de Diego (guitarrista) y Pedro Azcárraga (batería), se posaron en el escenario con la elegancia que les caracteriza, emitiendo la mítica “Échame a mí la culpa” del sinaloense «Ferrusquilla», José Ángel Espinoza, dando comienzo a lo que sería un recorrido por su trayecto sonoro que comprende seis placas de estudio y una en directo.
El pretexto perfecto de su regreso al país fue presentar Talento y locura, su sexto álbum, y como era de esperarse aventaron “Que no pare la vida” y “Te echo de menos”, piezas que emanan entre el blues y el swing, y que muestran la versatilidad que los define.
Los clásicos tienen que estar presentes, la reflexiva “Rubita”, la melancolía de “Mi querida estrella”, la declaración de “Invierno gris”, la complicidad de “Pienso en ti”, la resignación en “Paso a paso”, la entregada “Dos corazones”, la infaltable “Déjame decirte” y el reclamo en “Me he acostrumbado”, hicieron repaso por su amplio catálogo que incluyó lo más representativo de estas primeras dos décadas.
Llegó el momento de rendir homenaje y se dio con “No hay tregua” de los navarros Barricada, aunada a la heroica “Siempre fuerte” y a la animada “Escribe con el corazón”, que ponían fin al recital, no sin antes agradecer y complacer con el obligado encore que emitió a la culpable “Señora” y la despedida con la resistencia de la italiana “Bella ciao”, culminado la celebración y esperando que no sea tan eterno su regreso.
Texto: Eduardo Roel.
Fotos: Manuel Márquez.


































